València acoge la Cuarta Cabalgata del Patrimonio

El pasado domingo 10 de marzo tuvo lugar la Cuarta Cabalgata del Patrimonio, que recorrió las calles de Valencia, partiendo desde la Lonja a las 18 horas.

Este acontecimiento trata de aunar las diferentes manifestaciones festivas y rituales que, al igual que las Fallas desde 2016, están incluidas en la lista de Patrimonios Culturales Inmateriales de la Humanidad.

El recorrido de la Cabalgata continuó por la calle de María Cristina, la plaza del Ayuntamiento y por Marqués de Sotelo. El desfile estuvo encabezado por la Colla de Tabal y Dolçaina de Junta Central Fallera, la cual participa en diferentes actos oficiales, como por ejemplo, las galas de cultura, presentaciones de varios concursos, las exaltaciones de las falleras mayores de València o en la Ofrenda de Flores.

Tras ella aparecían los gigantes y cabezudos, habituales en las celebraciones festivas valencianas, de entre los cuales destacaron la pareja de gigantes que representan a Jaume I y Violant d’Hongria, hechos por José Luis Ceballos y Paco Sanabria.

Posteriormente, los asistentes pudieron contemplar la Danza Guerrera de Todolella quienes, “armados” con espadas y palos interpretaron un baile ancestral que evoca una realidad bélica de preparación para la guerra y posterior combate, propio del territorio valenciano.

Los Moros y Cristianos de Bocairent fueron los siguientes en desfilar por las avenidas valencianas, acompañados por la Sociedad Musical Vila de Bocairent.

A continuación, apareció el Carnaval de Barranquilla (Colombia), que fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en 2003. Con más de un millón de participantes entre visitantes y locales, es considerada la fiesta folclórica y cultural más importante del país sudamericano.

Les Fogueretes de Agullent, unas fiestas de Interés Turístico Provincial, fueron los penúltimos en participar en la cabalgata. Estas fiestas tienen su origen en el siglo XVII por la curación de la peste bubónica que se dispersó por la localidad de Agullent.

Por último, la Tamborada de Alzira, que también es Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Se inscribe en una tipología propia de ritos colectivos basados en el toque simultáneo, intenso y continuado de miles de tambores y bombos, a menudo inscritos en las celebraciones de Semana Santa. La que tiene lugar en la capital de la Ribera Alta se asocia a su celebración religiosa, en la que participan más de 7.000 miembros y está documentada desde el año 1539.